Rosa María Torres
EL MODELO DE PREPARACION DOCENTE QUE NO HA FUNCIONADO
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▸ Cada nueva política, plan o proyecto parte de cero
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(se ignoran o desestiman los antecedentes, el conocimiento y la experiencia acumulados)
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▸ Piensa la formación como una necesidad mayoritaria y principalmente de los docentes
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(no también de los directores, supervisores y otros agentes vinculados al sistema escolar a los diferentes niveles)
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▸ Ve la formación aislada de otras dimensiones de la condición docente
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(reclutamiento, salarios, condiciones laborales, mecanismos de promoción, etc.)
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▸ Ignora las condiciones reales del magisterio
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(motivaciones, intereses, inquietudes, conocimientos, tiempo y recursos disponibles, etc.)
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▸ Es vertical, viendo a los docentes únicamente en un rol pasivo de receptores y capacitandos
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(no consulta ni busca la participación activa del profesorado para la definición y el diseño del plan de reforma y del plan de formación en particular)
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▸ Parte de una propuesta homogénea destinada a "los maestros" en general
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(en lugar de buscar ajustar la oferta a los distintos tipos de docentes y a sus necesidades específicas)
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▸ Se basa en una concepción instrumental de la formación docente
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(la formación en servicio es vista como una herramienta para implementar una determinada política, programa, proyecto o incluso texto)
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▸ Asume que la necesidad de formación es inversamente proporcional al nivel y grado en que se enseña
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(desconociendo con ello la importancia y complejidad de la enseñanza a niños pequeños y en los primeros grados)
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▸ Apela a incentivos y motivaciones externas
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(tales como puntajes, ascenso, escalafón, mejoras salariales, etc. antes que al objetivo mismo del aprendizaje y la profesionalización docentes)
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▸ Se dirige a docentes individuales
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(no a grupos o equipos de trabajo, o a la escuela como institución)
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▸ Se realiza fuera del lugar de trabajo
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(típicamente, se saca al docente de su escuela, en vez de hacer de la escuela el lugar de formación permanente)
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▸ Es puntual y asistemática
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(no es parte de una política y una estrategia de formación y actualización continuas del magisterio, vinculada a su práctica docente)
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▸ Se centra en el evento - curso, seminario, conferencia, taller - como la modalidad privilegiada y hasta única de formación
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(desconociendo o viendo como secundarias otras modalidades: intercambio horizontal entre pares, trabajo en grupos, pasantías, viajes, autestudio, educación a distancia, etc.)
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▸ Disocia gestión administrativa y gestión pedagógica
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(lo pedagógico se considera patrimonio de los docentes y lo administrativo de los administradores, desconociendo la necesidad de desarrollar competencias integrales para ambas funciones)
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▸ Disocia contenidos y métodos (saber la materia y saber enseñar) y privilegia los contenidos
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(ignorando la necesaria complementariedad de ambos saberes y la importancia del saber pedagógico para el perfil y la práctica docentes)
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▸ Considera la educación/ formación como un asunto formal, revestido de seriedad y solemnidad
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(despreciando la importancia de crear un ambiente informal, relajado, apto para la inter-comunicación y el desarrollo de componentes lúdicos)
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▸ Está centrada en el punto de vista de la enseñanza: enseñar como objetivo
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(antes que en el punto de vista del aprendizaje: lograr aprendizajes significativos en los docentes y en los alumnos)
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▸ Ignora el conocimiento y la experiencia previa de los docentes
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(en lugar de partir de ellos para construir sobre ellos)
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▸ Está orientada a corregir y mostrar debilidades
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(antes que a identificar, valorar y reforzar fortalezas)
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▸ Es academicista y teoricista, centrada en el libro
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(niega la práctica docente como espacio y materia prima para el aprendizaje)
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▸ Se basa en el modelo frontal y transmisivo de enseñanza
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(la enseñanza como transmisión de información y el aprendizaje como digestión pasiva de dicha información)
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▸ Es incoherente con el modelo pedagógico que se propone a los docentes para su práctica en el aula
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(se les pide promover la enseñanza activa, la participación, el pensamiento crítico, la creatividad, que no experimentan en su proipio proceso de formación)
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* Tomado y adaptado de: Rosa María Torres, Formación docente: Clave de la reforma educativa, en: Nuevas formas de aprender y enseñar, UNESCO-OREALC, Santiago, 1996.
Muy interesante el análisis de los modelos de formación docente. En el caso de Colombia, los modelos de formación son importados; por tanto, no obedecen a las necesidades del docente ni del mismo sistema educativo. Sin embargo, se culpabiliza al docente de la crisis de la calidad de la educación.
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