Recordando al Conejo - Fernando Velasco Abad

¿Aprendizaje en el siglo 21? ¡Falta la naturaleza!


Rosa María Torres

"¿Cómo esperamos que surjan nuevos Newtons si los niños jamás ven manzanas cayéndose de los árboles?" Francesco Tonucci


"Existen oportunidades para el aprendizaje en todo momento y lugar, mucho más allá de la escuela como espacio educativo exclusivo. Los medios de comunicación, los dispositivos móviles, la conectividad, las redes sociales y de colaboración ofrecen oportunidades para el aprendizaje continuo". Aprender en el siglo XXI, Eugenio Severín, BID.



¡Falta la naturaleza! En los modernos listados de lugares y medios que destacan la ubicuidad del aprendizaje y que confluyen en el Aprendizaje a lo Largo de la Vida, nuevo paradigma para la educación y el aprendizaje en el mundo.

¡Falta la naturaleza! En las políticas y reformas educativas, entendidas limitadamente como escolares, proclives al encierro, los espacios reducidos, los equipamientos, los estándares, las evaluaciones y las pruebas, los deberes en casa, el papel, las pantallas, los cables.

¡Falta la naturaleza! En la construcción escolar, enamorada del cemento, los muros, las rejas, las paredes, los corredores, los patios encementados, las plantas pintadas en los muros y dibujadas en los textos escolares antes que las plantas, el césped y el verde de verdad.

¡Falta la naturaleza! En el sistema escolar convencional, desde la base y hasta el fin de la educación superior, que asocia enseñanza y aprendizaje con puertas adentro, mesas, asientos, artefactos, timbres, enchufes, candados, premios y castigos.

¡Falta la naturaleza! En la preparación de docentes y directivos, antes y durante el ejercicio de su tarea, no solo como contenido sino como espacio para el esparcimiento, el aprendizaje y el desarrollo personal.

¡Falta la naturaleza! En el mundo académico: en la investigación, en la formación, en seminarios y paneles, en criterios acerca de lo que es calidad educativa, "buen aprender", "buen enseñar", "buen saber" y "buen desempeño" profesional.

¡Falta la naturaleza!  En las ciudades y los nuevos diseños urbanos, más preocupados con hacer espacio a los autos y ofrecer wifi en lugares públicos que con ofrecer espacios verdes, bicisendas seguras, huertos escolares, lugares para leer al aire libre, senderos para ir en bicicleta a la escuela y al trabajo.

"Aprendizaje en el siglo 21" no es solo TIC, internet y conectividad. La "brecha digital", reflejo de muchas otras brechas, viene a agregarse a viejas brechas en las oportunidades de aprendizaje de niños, jóvenes y adultos en todo el mundo. El abandono del campo y la "brecha urbano/rural" - con todas sus manifestaciones y secuelas - persiste e incluso se profundiza en muchos lugares, entre otros en el ámbito de las tecnologías, a la par que la expansión de las ciudades y de sus problemas. 

El llamado "síndrome de abstinencia tecnológica" ocupa la atención y se extiende entre la minoría conectada, con acceso a banda ancha y a smart phones. Pero un síndrome mayor y más serio, el "síndrome de déficit de naturaleza", afecta a millones de niños, jóvenes y adultos de todas las condiciones sociales, en todo el mundo, y sobre todo en las ciudades, limitando su desarrollo, sus aprendizajes, sus horizontes, su comprensión del mundo.

Niños que no han visto el mar, la montaña, el río, el bosque, un atardecer, una noche estrellada, pájaros trinando de verdad, hormigas trabajando en fila. Niños urbanos que no saben lo que es arar la tierra, sembrar, cosechar, ver crecer un tomate, ordeñar una vaca. Niños alienados que creen que la comida viene en latas, el agua en botellas, los vegetales en bolsas plásticas, la carne en envoltorios congelados. Niños que van perdiendo el contacto consigo mismos, con su curiosidad, su capacidad de asombro, sus emociones e inventiva, y se vuelven dependientes de sujetos y estímulos externos para aprender.

El sedentarismo es ya epidemia mundial entre personas de todas las edades y crecientemente entre los niños, estacionados frente a pizarras, televisores, móviles, videojuegos, pantallas de todo tipo. La obsesidad, hija del sendentarismo, la mala alimentación y el mal dormir, adquiere también proporciones de epidemia mundial y avanza a ritmo acelerado entre la población infantil. Problemas emocionales, soledad, depresión, suicidio, van en alza en el mundo. Enretanto, avanzan los estudios que confirman los enormes poderes curativos de la naturaleza, buena para el cuerpo, el cerebro y el alma, el sosiego, la motivación, la concentración, la creatividad, la cognición, el sentimiento de felicidad. Incluso un poco de verde salpicando los espacios de la vida cotidiana ¡hace una enorme diferencia!

Precisamente, las encrucijadas del nuevo siglo y del nuevo milenio alertan que es tiempo de romper con el encierro. Tiempo de abrir puertas y ventanas de la casa, de la escuela, del barrio, de la comunidad. Tiempo de reunirse, socializar, jugar y aprender al aire libre. Tiempo de organizar el huerto, de aprender a cultivar y producir los propios alimentos. Tiempo de salir, de caminar, correr, saltar, pasear, redescubrir el parque, el columpio, la pelota, la bicicleta, el árbol para trepar, la cometa para volar. Tiempo de volver a la naturaleza y de hacer efectivo el derecho de niños y niñas a conocerla, disfrutarla, cuidarla y aprender de ella.


» Ningún niño sin escuela y ningún niño sin contacto con la naturaleza.
» Una planta por niño. Una mascota por niño.
» Derecho al aprendizaje al aire libre.
» La naturaleza, fuente inagotable de riqueza y de aprendizaje.


Para saber más:
Niños pueden sufrir el 'síndrome de déficit de naturaleza'
Leave No Child Inside  Time for kids to go back outside! 
Children's Outdoor Bill of Rights
Educar en Verde: Por una infancia en contacto con la naturaleza
Aprender desde el asombro
Alejarse de la tecnología puede provocar síndrome de abstinencia
Los beneficios de la naturaleza para los niños
'NaturePlay' film reveals Scandinavia's amazing nature-based education system
NaturePlay film (trailer)
¿Se debería enseñar agricultura en el cole? Una nueva asignatura para volver a las raíces

Experiencias 
30 coles quitan patios de cemento (Barcelona)
Escuela Hermann Müller: Brasil ensaya la alfabetización con flores y poesía
Jardineritos - preescolar (Guayaquil, Ecuador) / Reportaje diario Expreso
"La naturaleza es un aula de aprendizaje por excelencia" (Colombia), El Espectador, 5 enero 2014


Textos relacionados
▸ Rosa María Torres, Madre Tierra (México)
▸ Rosa María Torres, Los espejismos de la innovación en educación
Rosa María Torres, Falsas y verdaderas soluciones a los problemas de la educación  
Rosa María Torres, El barrio como espacio pedagógico: Una escuelita itinerante (Brasil) 
Rosa María Torres, Un día en la vida de un niño rural (Colombia) 
Rosa María Torres, Sobre ecología, educación y política
Rosa María Torres, Ecuador: Adiós a la educación comunitaria y alternativa
 

2 comments:

  1. MAESTRA ROSA MARÍA. Es un excelente trabajo que todos los directores de mi zona escolar tendrán que leer y reflexionar. Sus propuestas son claras y todas encaminadas al mejoramiento del trabajo educativo. MUCHAS GRACIAS por compartir. Varios de sus trabajos los he considerado en los Blogs que administro,[Recopilan recursos y materiales al servicio de los docentes]
    http://educativo1303.blogspot.com
    http://paradigmaeducativo35.blogspot.com

    Reciba atentos saludos

    ReplyDelete
  2. ¡Gracias! Siempre me alegra saber que mis escritos resultan útiles, sobre todo a los maestros... Los blogs Recursos Pedagógicos y Paradigma Educativo que menciona ya están incorporados en la Blogófera Educativa Latinoamericana, en este mismo blog. Fíjese en http://otra-educacion.blogspot.com.ar/p/blogosfera-educativa-latinoamericana.html Dentro de México. Saludos. Rosa María

    ReplyDelete

Note: Only a member of this blog may post a comment.