(actualización: 15 noviembre 2023)
Guillermo Lasso fundó en 2012 el Movimiento CREO (Creando Oportunidades). Fues tres veces candidato a la Presidencia en el Ecuador: en 2012, 2017 y 2021. En 2012 perdió frente a Rafael Correa, en 2017 perdió frente a Lenin Moreno y en 2021 ganó frente a Andrés Arauz, candidato de Correa al igual que Moreno. Su gobierno duró dos años y medio (mayo 2021-noviembre 2023); no logró completar los cuatro años establecidos. Después de decretar la "muerte cruzada" (cierre de la Asamblea Nacional), en medio de un juicio político, se retiró del gobierno, con una aprobación nacional de 15%, la más baja de la región.
2.1.1. Ecuador del Conocimiento Desarrollaremos
un sistema educativo que responda a las necesidades e identidad
cultural de los estudiantes, los padres de familia, y que sea inclusivo
con los docentes.1.1.1. Diagnóstico Una educación que ofrezca un buen presente y futuro. La forma en que una sociedad eduque a sus niños y jóvenes determinará el futuro de esa patria. Los padres y madres de familia de nuestro Ecuador conocen esto, por eso realizan enormes esfuerzos por educar a sus hijos. Estos esfuerzos se reflejan en las ilusiones de los estudiantes, sus deseos de aprender, de prosperar y así enorgullecer y ayudar económicamente a sus familias. En promedio, los ecuatorianos solo completan 10 años de educación en la zona urbana y 7 en la zona rural.3 Muchos jóvenes deben interrumpir sus estudios para empezar a trabajar y así ayudar económicamente a su familia. Por eso, si bien 9 de cada 10 niños se registran en la educación básica, solo 6 de cada 10 adolescentes llegan a culminarla y únicamente 3 de cada 10 avanzan hasta la universidad. El 70% de las instituciones educativas del país corresponden al sector público y el presupuesto de este sector se ha mantenido en promedio alrededor del 16% del total del Presupuesto General del Estado. Sin embargo, si tuviéramos que caracterizar los resultados en las pruebas de desempeño escolar diríamos que nuestro país pierde el año en matemáticas y lenguaje. El promedio de las notas obtenidas por nuestros niños desde el año 1996 al 2007 es de 6,8 en matemáticas y de 10,7 en lenguaje, sobre 20, en las Pruebas Aprendo. Similar situación se refleja en las pruebas Ser Ecuador (Gráfico No. 1).4 Esta es la realidad educativa de nuestro país que, aunque acerca a muchos a las aulas, aún no logra que la mayoría de jóvenes complete su bachillerato ni que las enseñanzas impartidas generen mayor prosperidad y bienestar para los ecuatorianos. A la gratuidad hay que agregarle calidad La situación actual del sistema educativo nos muestra una dura realidad, en la que los niños se registran en la educación básica y eventualmente la completan, pero no continúan el resto de su formación. Por otro lado, se ha dado una desvinculación de los padres respecto del proceso educativo de sus hijos, trasladando a los educadores mayor responsabilidad de la que les corresponde. Es imprescindible que los padres recuperemos nuestro rol como formadores y verdaderos responsables de la educación de nuestros niños. A pesar de que la educación fiscal secundaria es gratuita, la decisión de los estudiantes y de sus padres también se basa en otros aspectos: la percepción de que los estudios no beneficiarán significativamente sus vidas y que el tiempo requerido para cursar sus estudios implica la pérdida de oportunidades de trabajo y de obtención de ingresos necesarios para sus familias. Este tipo de situaciones son las que ocasionan que muy pocas personas -aproximadamente solo una de cada tres- culminen su bachillerato.5 En el caso de los adultos, 3 de cada 10 en la zona rural y al menos 1 de 10 en la zona urbana, ven afectada su vida diaria por la dificultad que tienen para comprender textos sencillos o realizar cálculos matemáticos elementales, a pesar de que formalmente aprendieron a leer y escribir. Para casi un millón de ecuatorianos la situación es mucho más grave, puesto que definitivamente no saben leer ni escribir; es decir, sufren de analfabetismo absoluto.6 Todo lo anterior nos muestra la magnitud del desafío que tenemos al frente: lograr que la matriculación escolar incluya a todos los niños y jóvenes de las diversas identidades culturales del país, y además, los mantenga en el sistema, adaptando los programas de estudio a las necesidades de su entorno. También se debe fortalecer el talento de los educadores en función de las tecnologías actuales, con el fin de evitar el abandono y la deserción de los estudiantes y propicie el acceso a la educación superior. 2.1.1.2. Objetivo Específico Alcanzar un sistema educativo intercultural, eficiente y de alta calidad al que todos puedan acceder. 2.1.1.3. Propuestas - Facilitar la generación de contenidos curriculares que atiendan las verdaderas necesidades, aspiraciones e identidad cultural de los estudiantes. - Fomentar que la educación fortalezca la identidad cultural de los alumnos y la unidad nacional. - Impulsar la continuidad de los estudiantes dentro del Sistema Educativo. Vincular a los padres de familia y comunidad en el proceso educativo. - Reforzar el talento docente y desarrollar sus capacidades por medio de una formación continua. - Incrementar la eficiencia y eficacia en la administración de los recursos. - Fortalecer un programa de becas educativas, en los distintos niveles, en el ámbito nacional e internacional. 2.1.1.4. Estrategias - Establecer un currículo mínimo, adecuado y flexible para cada nivel educativo. - Revisar los estándares actuales y sus criterios de medición para hacerlos compatibles con la de un currículo flexible. - Fomentar el uso de tecnología de la educación en el proceso de enseñanza y aprendizaje. - Orientar la provisión y financiamiento de la educación hacia la demanda. - Empoderar a los padres de familia en la elección del tipo de educación para sus hijos. - Aplicar un sistema de evaluación diseñado participativamente. - Fortalecer la gestión desconcentrada de la educación. - Vincular la provisión de recursos con el número de estudiantes atendidos. - Continuar el mejoramiento de procesos administrativos. - Propiciar convenios interinstitucionales a nivel nacional e internacional para capacitación, investigación, tecnología, becas e infraestructura. |
Plan de gobierno 2017-2021
Alianza CREO-Suma
Por un Ecuador Justo, Próspero y Solidario
Copiamos aquí la sección referida a Educación del Plan 2021-2025, con el que ganó las elecciones. Agregamos negritas para destaque.
1.4. EDUCACIÓN DIVERSA Y DE CALIDAD
Un sistema destruido por el centralismo
El conocimiento es dinámico y está en constante evolución. Por eso es importante que los sistemas educativos marchen al ritmo de esta evolución. De lo contrario, fracasarán en su objetivo de preparar a las nuevas generaciones para los desafíos intelectuales, profesionales y personales de su vida.
En Ecuador sucede todo lo contrario. El sistema educativo es, en general, cada vez más rígido. A pesar de la diversidad cultural de nuestra sociedad, la administración central y control estatal son cada vez más agresivos. Existe poco o ningún espacio para la innovación y diversidad.
Esta situación ha provocado un deterioro en nuestro sistema educativo que se evidencia desde la educación inicial hasta la superior. Desde asuntos administrativos hasta académicos, la excesiva intrusión estatal merma la calidad de la educación que reciben nuestros hijos.
Un ejemplo de ineficiencia e ineficacia es el Programa de Alimentación Escolar. En 2019, el Gobierno destinó USD 153 millones al Ministerio de Educación para financiar la alimentación de aproximadamente 2,9 millones de estudiantes. El programa ni siquiera cubre la totalidad de estudiantes que debería.
Otra falla lamentable de administración fue la decisión de cerrar las escuelas rurales, donde se encuentran un cuarto de los estudiantes de todo el país. El cierre de aproximadamente 5.000 escuelas rurales excluyó a muchos niños y jóvenes del sistema educativo.
Pero los problemas administrativos no son los únicos. La pobreza y falta de empleo también impactan en el acceso a la educación. Muchos jóvenes deben interrumpir sus estudios para empezar a trabajar y ayudar económicamente a sus familias. Esto causó que, en promedio, los ecuatorianos a duras penas completen diez años de educación en la zona urbana y siete en la zona rural. A nivel nacional la tasa de abandono en la educación básica es de 2,1% y en bachillerato de 5,3%. Únicamente dos de cada diez avanzan hasta la universidad e institutos técnicos.
Y aunque no todos los jóvenes buscan acceder a la universidad, los cupos para postulación son insuficientes. Actualmente, las Instituciones de Educación Superior (IES) públicas solo ofrecen cupos a seis de cada diez estudiantes. En el primer semestre de 2020 fueron 173.000 jóvenes quienes postularon para obtener un cupo de los 113.000 ofertados por las IES públicas. En consecuencia, aproximadamente
el 40% de los postulantes no podrán acceder a la universidad por la falta de cupos ofertados.
A esto se suma la insuficiencia de la educación dual. La falta de incentivos y apoyo para la educación técnica ha limitado la oferta de institutos técnicos en el país, que además sufre de desconfianza en la calidad como consecuencia del desprestigio que sufrió por parte de administraciones pasadas. Entre 2007 y 2018, por ejemplo, los graduados de las universidades ecuatorianas crecieron 30%, mientras que los
graduados de la educación dual tan solo 4%. Por otra parte, entre 2018 y 2019, fueron 46 los institutos técnicos que desaparecieron.
Sorprendentemente, la mayoría de estos obstáculos y retrasos en los estudios de tercer nivel se dieron a partir de la aprobación de la Ley Orgánica de Educación Superior que se ha vuelto una traba para el desarrollo de las Instituciones de Educación Superior.
Los Institutos de Educación Superior (IES) han perdido libertades fundamentales. La actual ley no garantiza la autonomía de las universidades, escuelas politécnicas e institutos técnicos. Por el contrario, fomenta la politización de la educación. Así se imposibilita el correcto crecimiento, desarrollo e innovación académica.
A todo esto se suman los desafíos logísticos a causa de la pandemia del COVID-19. Las posibilidades de adaptación son limitadas debido a la falta de flexibilidad y excesivo centralismo. Asimismo, se evidencia la falta de desarrollo y acceso tecnológico, que se complica en un sistema donde se norma hasta el uso de los recursos e inversiones. Debemos transitar a un modelo educativo moderno y que propicie la calidad.
Un modelo educativo que nos involucre a todos
La situación actual del sistema educativo nos muestra una dura realidad en la que los niños se registran en la educación básica y eventualmente la completan, pero no continúan el resto de su formación.
Por otro lado, la desvinculación de los padres respecto del proceso educativo de sus hijos se va dando de manera paulatina, trasladando a los educadores y al centro educativo mayor responsabilidad de la que les corresponde en la educación de sus hijos.
Es imprescindible que los padres se concienticen de su rol como primeros educadores y verdaderos responsables de la educación de nuestros niños, y a la familia como núcleo formativo y modelo a seguir.
Asimismo, es indispensable que la nueva visión de la educación contemple la diversidad como un fundamento básico para su desarrollo. No podemos insistir en la visión fallida del centralismo. La educación se transforma constantemente y nuestro sistema educativo debe estar listo para adaptarse en todo momento.
A todo esto hay que sumar las ayudas e incentivos para que los más vulnerables no abandonen la educación. Debemos fortalecer los programas de alimentación escolar, la educación rural, y facilitar la oferta de modalidades de educación superior.
La calidad se logra con diversidad
En educación diversidad es sinónimo de libertad. La educación del futuro demanda de diversidad en todos sus niveles. Desde la educación inicial hasta la superior realizaremos reformas normativas a fin de lograr un sistema educativo diverso y no centralizado. Que involucre a todos y no solo la visión del Estado.
Plantearemos una reforma a la Ley de Educación Intercultural para que las escuelas y colegios logren ser libres y competitivos tanto a nivel nacional como internacional. Asimismo, eliminaremos toda aquella normativa de menor jerarquía que distorsiona el correcto funcionamiento de la educación primaria, secundaria y superior.
Reconstruiremos la educación rural en el país. Reabriremos y fortaleceremos al menos 900 escuelas rurales en todo el país. Las dotaremos de los insumos necesarios para los estudiantes e implementaremos metodologías educativas innovadoras para que estén a la par con el área urbana.
De igual manera, no descuidaremos la conectividad a internet de cada una de estas escuelas (urbano y rural) tanto para sus estudiantes como para los docentes.
Del mismo modo impulsaremos los programas de alimentación escolar y de educación para niños y jóvenes con necesidades educativas especiales. Ellos no se quedarán atrás en esta nueva visión educativa.
Nuestros profesores y las futuras generaciones de docentes no estarán solos. Implementaremos programas de excelencia para las futuras generaciones de educadores. Crearemos la escuela digital de capacitación docente, para llevar al máximo el nivel académico y de dominio de las TICs de nuestros profesores. Así devolveremos el respeto y prestigio que merecen todos los educadores del Ecuador.
No podemos ignorar que nuestro sistema educativo es ineficiente y obsoleto. Es por esto que vamos a incorporar al Ecuador al Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA) y no a PISA-Desarrollo. Así nuestro sistema educativo estará enfocado en cubrir las capacidades y aptitudes enseñadas en los mejores sistemas educativos del mundo.
Educación superior libre y de nivel mundial
La propuesta de Lasso para la educación se enmarcó bajo el título de Educación de Calidad e incluyó seis puntos.
▸ El punto 1, "Empoderar a los padres sobre la decisión de educación de sus hijos", propone el voucher escolar (también conocido como cupón o cheque escolar), una propuesta aplicada, con diversas modalidades y resultados, en varios países. El texto pone como referencia a Chile, país en el que existe hoy la mayor crítica a la implementación del voucher.
El sistema de vouchers escolares propone entregar un bono o cheque a los padres de familia para financiar la educación de sus hijos, y que sean ellos quienes deciden a qué escuela y a qué tipo de escuela envían a sus hijos: pública, privada o comunitaria. Se menciona a Chile, pero este sistema se ha aplicado en muchos países del mundo, con resultados mixtos y con propuestas diversas y con resultados mixtos. La investigación indica que la competencia entre escuelas puede acentuar la inequidad. No siempre implica privatización ni tampoco eliminar la gratuidad.
▸ El punto 2, "Fortalecer el cuerpo docente", reitera lugares comunes sobre este tema, sin análisis ni profundización.
▸ El punto 3 se refiere a la participación del Ecuador en la prueba internacional PISA de la OCDE. En 2014 el gobierno de Correa decidió participar en el piloto de PISA for Development (PISA-D) diseñado para «países en desarrollo» de ingresos medios y bajos. La prueba se aplicó en 2017. En 2019 el gobierno de Moreno decidió descontinuar la participación en PISA; así lo comunicó el tercer ministro de educación de Moreno, Milton Luna. La ministra de educación de Lasso, María Brown, informó que el gobierno estaba en conversaciones con la OCDE para retomar la participación en PISA 2025.
▸ El punto 4, "flexibilizar los contenidos", se refiere a diversos aspectos de una reforma curricular, entre los que se menciona la innovación y la actualización de los contenidos, la oferta de educación técnica, el combate a "inculcar lineamientos ideológicos desde el poder central", y una mención al desarrollo del pensamiento crítico.
▸ El punto 5 se refiere a la educación superior y al acceso a la universidad, tema crítico en el Ecuador hoy y el asunto más polémico y cuestionado de la propuesta educativa de Lasso. Ofreció eliminar el examen de ingreso a la universidad; lo que hizo fue sustituir el examen existente (EAS) con otro examen, llamado Transformar, para luego decidir que sean las propias universidades las que determinen sus requisitos de admisión. Lasso creó la ilusión de que en su gobierno todos podrían acceder a la universidad y cada estudiante podría decidir qué quería estudiar. Ofreció asimismo eliminar la SENESCYT (Secretaría de Educación Superior, Ciencia, Tecnología e Innovación), cosa que no hizo y con la cual tampoco lograría resolver los problemas de acceso a la universidad.
▸ El punto 6 se refiere a becas. Lasso ofreció continuar con las becas «en las mejores universidades del mundo» que fueron parte del gobierno de Correa y duplicar el presupuesto. Propuso asimismo universalizar la educación virtual.
▸ También ofreció dar continuidad a las Unidades Educativas del Milenio (UEM), iniciadas por Correa, para las que tuvo comentarios elogiosos.
▸ A cinco días de la posesión de Lasso, su ministra de educación, María Brown, escribió en Twitter. "Se acerca el inicio de funciones, estas son las #5Propuestas20Acciones que en mi gestión tendrán los primeros resultados en los primeros cien días":
Alianza CREO-Suma
Por un Ecuador Justo, Próspero y Solidario
Alianza CREO-PSC
POR UN ECUADOR JUSTO, PROSPERO Y SOLIDARIO
(Documento de 87 páginas entregado al Consejo Nacional Electoral - CNE).
Copiamos aquí la sección referida a Educación del Plan 2021-2025, con el que ganó las elecciones. Agregamos negritas para destaque.
1.4. EDUCACIÓN DIVERSA Y DE CALIDAD
Un sistema destruido por el centralismo
El conocimiento es dinámico y está en constante evolución. Por eso es importante que los sistemas educativos marchen al ritmo de esta evolución. De lo contrario, fracasarán en su objetivo de preparar a las nuevas generaciones para los desafíos intelectuales, profesionales y personales de su vida.
En Ecuador sucede todo lo contrario. El sistema educativo es, en general, cada vez más rígido. A pesar de la diversidad cultural de nuestra sociedad, la administración central y control estatal son cada vez más agresivos. Existe poco o ningún espacio para la innovación y diversidad.
Esta situación ha provocado un deterioro en nuestro sistema educativo que se evidencia desde la educación inicial hasta la superior. Desde asuntos administrativos hasta académicos, la excesiva intrusión estatal merma la calidad de la educación que reciben nuestros hijos.
Un ejemplo de ineficiencia e ineficacia es el Programa de Alimentación Escolar. En 2019, el Gobierno destinó USD 153 millones al Ministerio de Educación para financiar la alimentación de aproximadamente 2,9 millones de estudiantes. El programa ni siquiera cubre la totalidad de estudiantes que debería.
Otra falla lamentable de administración fue la decisión de cerrar las escuelas rurales, donde se encuentran un cuarto de los estudiantes de todo el país. El cierre de aproximadamente 5.000 escuelas rurales excluyó a muchos niños y jóvenes del sistema educativo.
Pero los problemas administrativos no son los únicos. La pobreza y falta de empleo también impactan en el acceso a la educación. Muchos jóvenes deben interrumpir sus estudios para empezar a trabajar y ayudar económicamente a sus familias. Esto causó que, en promedio, los ecuatorianos a duras penas completen diez años de educación en la zona urbana y siete en la zona rural. A nivel nacional la tasa de abandono en la educación básica es de 2,1% y en bachillerato de 5,3%. Únicamente dos de cada diez avanzan hasta la universidad e institutos técnicos.
Y aunque no todos los jóvenes buscan acceder a la universidad, los cupos para postulación son insuficientes. Actualmente, las Instituciones de Educación Superior (IES) públicas solo ofrecen cupos a seis de cada diez estudiantes. En el primer semestre de 2020 fueron 173.000 jóvenes quienes postularon para obtener un cupo de los 113.000 ofertados por las IES públicas. En consecuencia, aproximadamente
el 40% de los postulantes no podrán acceder a la universidad por la falta de cupos ofertados.
A esto se suma la insuficiencia de la educación dual. La falta de incentivos y apoyo para la educación técnica ha limitado la oferta de institutos técnicos en el país, que además sufre de desconfianza en la calidad como consecuencia del desprestigio que sufrió por parte de administraciones pasadas. Entre 2007 y 2018, por ejemplo, los graduados de las universidades ecuatorianas crecieron 30%, mientras que los
graduados de la educación dual tan solo 4%. Por otra parte, entre 2018 y 2019, fueron 46 los institutos técnicos que desaparecieron.
Sorprendentemente, la mayoría de estos obstáculos y retrasos en los estudios de tercer nivel se dieron a partir de la aprobación de la Ley Orgánica de Educación Superior que se ha vuelto una traba para el desarrollo de las Instituciones de Educación Superior.
Los Institutos de Educación Superior (IES) han perdido libertades fundamentales. La actual ley no garantiza la autonomía de las universidades, escuelas politécnicas e institutos técnicos. Por el contrario, fomenta la politización de la educación. Así se imposibilita el correcto crecimiento, desarrollo e innovación académica.
A todo esto se suman los desafíos logísticos a causa de la pandemia del COVID-19. Las posibilidades de adaptación son limitadas debido a la falta de flexibilidad y excesivo centralismo. Asimismo, se evidencia la falta de desarrollo y acceso tecnológico, que se complica en un sistema donde se norma hasta el uso de los recursos e inversiones. Debemos transitar a un modelo educativo moderno y que propicie la calidad.
Un modelo educativo que nos involucre a todos
La situación actual del sistema educativo nos muestra una dura realidad en la que los niños se registran en la educación básica y eventualmente la completan, pero no continúan el resto de su formación.
Por otro lado, la desvinculación de los padres respecto del proceso educativo de sus hijos se va dando de manera paulatina, trasladando a los educadores y al centro educativo mayor responsabilidad de la que les corresponde en la educación de sus hijos.
Es imprescindible que los padres se concienticen de su rol como primeros educadores y verdaderos responsables de la educación de nuestros niños, y a la familia como núcleo formativo y modelo a seguir.
Asimismo, es indispensable que la nueva visión de la educación contemple la diversidad como un fundamento básico para su desarrollo. No podemos insistir en la visión fallida del centralismo. La educación se transforma constantemente y nuestro sistema educativo debe estar listo para adaptarse en todo momento.
A todo esto hay que sumar las ayudas e incentivos para que los más vulnerables no abandonen la educación. Debemos fortalecer los programas de alimentación escolar, la educación rural, y facilitar la oferta de modalidades de educación superior.
La calidad se logra con diversidad
En educación diversidad es sinónimo de libertad. La educación del futuro demanda de diversidad en todos sus niveles. Desde la educación inicial hasta la superior realizaremos reformas normativas a fin de lograr un sistema educativo diverso y no centralizado. Que involucre a todos y no solo la visión del Estado.
Plantearemos una reforma a la Ley de Educación Intercultural para que las escuelas y colegios logren ser libres y competitivos tanto a nivel nacional como internacional. Asimismo, eliminaremos toda aquella normativa de menor jerarquía que distorsiona el correcto funcionamiento de la educación primaria, secundaria y superior.
Reconstruiremos la educación rural en el país. Reabriremos y fortaleceremos al menos 900 escuelas rurales en todo el país. Las dotaremos de los insumos necesarios para los estudiantes e implementaremos metodologías educativas innovadoras para que estén a la par con el área urbana.
De igual manera, no descuidaremos la conectividad a internet de cada una de estas escuelas (urbano y rural) tanto para sus estudiantes como para los docentes.
Del mismo modo impulsaremos los programas de alimentación escolar y de educación para niños y jóvenes con necesidades educativas especiales. Ellos no se quedarán atrás en esta nueva visión educativa.
Nuestros profesores y las futuras generaciones de docentes no estarán solos. Implementaremos programas de excelencia para las futuras generaciones de educadores. Crearemos la escuela digital de capacitación docente, para llevar al máximo el nivel académico y de dominio de las TICs de nuestros profesores. Así devolveremos el respeto y prestigio que merecen todos los educadores del Ecuador.
No podemos ignorar que nuestro sistema educativo es ineficiente y obsoleto. Es por esto que vamos a incorporar al Ecuador al Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA) y no a PISA-Desarrollo. Así nuestro sistema educativo estará enfocado en cubrir las capacidades y aptitudes enseñadas en los mejores sistemas educativos del mundo.
Educación superior libre y de nivel mundial
La educación superior debe ser autónoma, libre y generadora de conocimiento, mas no una herramienta de adoctrinamiento político. Del mismo modo, la acreditación de universidades debe responder verdaderamente a la calidad y no a afinidades con el gobierno de turno. Para conseguirlo presentaremos un proyecto de ley reformatorio a la Ley de Educación Superior. El objetivo será encaminar la universidad ecuatoriana hacia la educación del futuro y lograr una educación de altos estándares de calidad, para que nuestras universidades públicas y particulares compitan con las mejores de la región.
Además, mejoraremos el proceso de acceso a la universidad y garantizaremos la independencia académica de las universidades de sus entes reguladores. Nunca más los jóvenes verán truncados sus sueños de acceder a la universidad.
Generaremos los incentivos adecuados para la creación de nuevos y mejores programas a nivel de grado y posgrado en modalidades presenciales y no presenciales.
Por otro lado, trabajaremos junto al sector de las telecomunicaciones para mejorar la conectividad de estudiantes tanto a nivel de educación básica, intermedia como superior y el acceso a plataformas tecnológicas para educación virtual y a distancia.
Por último, no escatimaremos esfuerzos para fortalecer la formación técnica y tecnológica que permita a los jóvenes capacitarse y estar listos para trabajar y emprender en 2 o 3 años y, si así lo desea, continuar su carrera retomando sus estudios. De esta manera, no sólo apoyaremos a mejorar la calidad de vida de los
jóvenes ecuatorianos y de sus familias, sino también sus posibilidades de conseguir un empleo adecuado.
Además, mejoraremos el proceso de acceso a la universidad y garantizaremos la independencia académica de las universidades de sus entes reguladores. Nunca más los jóvenes verán truncados sus sueños de acceder a la universidad.
Generaremos los incentivos adecuados para la creación de nuevos y mejores programas a nivel de grado y posgrado en modalidades presenciales y no presenciales.
Por otro lado, trabajaremos junto al sector de las telecomunicaciones para mejorar la conectividad de estudiantes tanto a nivel de educación básica, intermedia como superior y el acceso a plataformas tecnológicas para educación virtual y a distancia.
Por último, no escatimaremos esfuerzos para fortalecer la formación técnica y tecnológica que permita a los jóvenes capacitarse y estar listos para trabajar y emprender en 2 o 3 años y, si así lo desea, continuar su carrera retomando sus estudios. De esta manera, no sólo apoyaremos a mejorar la calidad de vida de los
jóvenes ecuatorianos y de sus familias, sino también sus posibilidades de conseguir un empleo adecuado.
La propuesta de Lasso para la educación se enmarcó bajo el título de Educación de Calidad e incluyó seis puntos.
De educación se ha hablado mucho en estos años, y se ha gastado otro tanto. Pero lastimosamente se ha logrado poco en términos de calidad. El Estado ha impregnado una visión controladora y acaparadora de cada una de las fases de la educación, arrinconando al sector privado, sometiendo a profesores y maestros a experimentos tecnocráticos. Estas son las acciones que tomaremos para remediarlo:EDUCACIÓN DE CALIDAD
1. EMPODERAR A LOS PADRES SOBRE LA DECISIÓN DE EDUCACIÓN DE SUS HIJOS
Redirigir los recursos destinados a la educación pública hacia los padres de familia directamente. El padre o madre de familia puede optar por permanecer en el sistema de educación pública o migrar al sistema de educación privada o comunitaria, según sus preferencias.
2. FORTALECER EL CUERPO DOCENTE
Implementar un sistema de capacitación que realmente fortalezca las capacidades de los docentes. Resaltar la figura de los maestros como aliados en el proceso educativo. Generar un ambiente de colaboración, facilitando la supervisión, evaluación e incentivos adecuados.
3. INCORPORAR AL ECUADOR EN LAS MEDICIONES INTERNACIONALES
Por ejemplo con las pruebas PISA, motivando la competencia, la actualización y las buenas prácticas. Así se genera un compromiso con el aumento de la calidad de la educación. Y esta calidad debe comenzar por el conocimiento divulgado, por la eficiencia pedagógica y por su trascendencia futura.
4. FLEXIBILIZAR LOS CONTENIDOS
Facilitar la generación de contenidos que atiendan las verdaderas necesidades de la sociedad moderna y responder mejor a las necesidades educativas diversas. Promover la aplicación de los conocimientos adquiridos mediante la educación técnica. Generar espacios para la innovación pedagógica y tecnológica. No podemos seguir por la deriva uniformadora que busca inculcar lineamientos ideológicos desde el poder central. Debemos asegurar que nuestros niños y jóvenes reciban educación que los prepare para un mundo global y con un pensamiento crítico.
5. DEVOLVER LA AUTONOMÍA UNIVERSITARIA
El objetivo es reforzar la autonomía en las universidades para que establezcan sus propios procesos de admisión. El sistema educativo deberá responder a las verdaderas necesidades de los estudiantes universitarios. El estudiante podrá elegir libremente la carrera de acuerdo a sus intereses y aptitudes.
6. FORTALECER EL PROGRAMA DE BECAS DE POSGRADO
Duplicaremos el presupuesto de becas de posgrado universitario, y estableceremos convenios con las mejores universidades del mundo para que reciban a nuestros egresados en todas las áreas del saber. Adicionalmente, adoptaremos la educación online como sistema de aprendizaje universal frente a los nuevos adelantos tecnológicos que nos ofrecen las mejores universidades del mundo.
▸ El punto 1, "Empoderar a los padres sobre la decisión de educación de sus hijos", propone el voucher escolar (también conocido como cupón o cheque escolar), una propuesta aplicada, con diversas modalidades y resultados, en varios países. El texto pone como referencia a Chile, país en el que existe hoy la mayor crítica a la implementación del voucher.
El sistema de vouchers escolares propone entregar un bono o cheque a los padres de familia para financiar la educación de sus hijos, y que sean ellos quienes deciden a qué escuela y a qué tipo de escuela envían a sus hijos: pública, privada o comunitaria. Se menciona a Chile, pero este sistema se ha aplicado en muchos países del mundo, con resultados mixtos y con propuestas diversas y con resultados mixtos. La investigación indica que la competencia entre escuelas puede acentuar la inequidad. No siempre implica privatización ni tampoco eliminar la gratuidad.
▸ El punto 2, "Fortalecer el cuerpo docente", reitera lugares comunes sobre este tema, sin análisis ni profundización.
▸ El punto 3 se refiere a la participación del Ecuador en la prueba internacional PISA de la OCDE. En 2014 el gobierno de Correa decidió participar en el piloto de PISA for Development (PISA-D) diseñado para «países en desarrollo» de ingresos medios y bajos. La prueba se aplicó en 2017. En 2019 el gobierno de Moreno decidió descontinuar la participación en PISA; así lo comunicó el tercer ministro de educación de Moreno, Milton Luna. La ministra de educación de Lasso, María Brown, informó que el gobierno estaba en conversaciones con la OCDE para retomar la participación en PISA 2025.
▸ El punto 4, "flexibilizar los contenidos", se refiere a diversos aspectos de una reforma curricular, entre los que se menciona la innovación y la actualización de los contenidos, la oferta de educación técnica, el combate a "inculcar lineamientos ideológicos desde el poder central", y una mención al desarrollo del pensamiento crítico.
▸ El punto 5 se refiere a la educación superior y al acceso a la universidad, tema crítico en el Ecuador hoy y el asunto más polémico y cuestionado de la propuesta educativa de Lasso. Ofreció eliminar el examen de ingreso a la universidad; lo que hizo fue sustituir el examen existente (EAS) con otro examen, llamado Transformar, para luego decidir que sean las propias universidades las que determinen sus requisitos de admisión. Lasso creó la ilusión de que en su gobierno todos podrían acceder a la universidad y cada estudiante podría decidir qué quería estudiar. Ofreció asimismo eliminar la SENESCYT (Secretaría de Educación Superior, Ciencia, Tecnología e Innovación), cosa que no hizo y con la cual tampoco lograría resolver los problemas de acceso a la universidad.
▸ El punto 6 se refiere a becas. Lasso ofreció continuar con las becas «en las mejores universidades del mundo» que fueron parte del gobierno de Correa y duplicar el presupuesto. Propuso asimismo universalizar la educación virtual.
▸ También ofreció dar continuidad a las Unidades Educativas del Milenio (UEM), iniciadas por Correa, para las que tuvo comentarios elogiosos.
▸ A cinco días de la posesión de Lasso, su ministra de educación, María Brown, escribió en Twitter. "Se acerca el inicio de funciones, estas son las #5Propuestas20Acciones que en mi gestión tendrán los primeros resultados en los primeros cien días":
- Reactivación de las instituciones educativas.
- Fortalecimiento
del enfoque inclusivo, con pertinencia comunitaria, cultural y
territorial, en todo el sistema educativo nacional.
- Flexibilización
de las modalidades del sistema nacional de educación, otorgando mayor
autonomía responsable a los distintos actores y proveedores del sistema
educativo.
- Dotación de herramientas tecnológicas,
herramientas digitales, promoción de la salud y el bienestar,
orientación vocacional, vínculo con la educación superior; y apoyo en la
consecución del plan de vida de los estudiantes del Sistema Nacional de
Educación.
- Reformar la normativa para incrementar la eficiencia administrativa del Ministerio de Educación, así como la dignificación de la carrera profesional de docentes y directivos.