Descongestionar el sistema escolar



Ilustración: Revista Nexos


Escribí este artículo en 2019, un año antes de que irrumpiera la pandemia del COVID-19 y el confinamiento diera paso al experimento mundial de escolarizar a distancia en y desde el hogar, mientras se daban las condiciones para el retorno a las aulas. La pandemia lo volvió aún más pertinente.

Descongestionar el sistema escolar es una necesidad no solo coyuntural sino epocal, reconociendo su pérdida de protagonismo (dejó de ser el
«templo del saber»), la cada vez mayor multiplicación y diversificación de espacios y herramientas de aprendizaje por fuera de las aulas, la histórica lentitud del sistema escolar para incorporar los cambios que se dan en la sociedad, la reconocida necesidad de replanteamientos profundos al modelo escolar convencional, y el reconocimiento del Aprendizaje a lo Largo de la Vida como paradigma para la educación y los aprendizajes en el siglo XXI.



Un problema que arrastran los sistemas educativos es la idea de que toda educación y todo aprendizaje pasan por las aulas. Detrás de esta falsa creencia está la confusión entre educación y escolarización, asumiéndose que el sistema educativo es el único lugar donde se hace educación y donde se aprende, y que hay que enseñarlo todo (según lo que autoridades y expertos consideran necesario aprender, en cada país, en cada nivel y en cada asignatura). Resultado: demasiados contenidos (muchos de ellos irrelevantes e incluso obsoletos), poco tiempo para comprender y aprender, y carrera para
«cumplir» con los planes de estudio.

Romper con esa tradición escolar, repensar qué es realmente esencial aprender, optar por poco en profundidad en vez de por mucho superficialmente y a las carreras, es un sello de las reformas educativas promisorias y condición del aprendizaje placentero y del aprendizaje profundo. "Enseñar menos, aprender más" ha sido, en años recientes, lema de la reforma educativa en Singapur.

El problema es ampliamente reconocido, pero poco o nada se hace al respecto. En muchos países, gobierno, sociedad civil y organismos internacionales siguen proponiendo más - no menos - tiempo, tareas y contenidos para el sistema escolar.

La escuela sigue percibiéndose como repositorio de todas las iniciativas pensadas para resolver los problemas educativos y sociales. La escuela enseña, socializa, da de comer. Cada viejo o nuevo problema de la sociedad tiende a verse como un problema educativo y éste a entenderse como problema escolar.

En realidad, no todo pasa por la educación. Muchas cuestiones pueden encararse y empezar a resolverse con información. Para eso tenemos medios masivos de información y comunicación, Internet, redes sociales. Contar con información confiable, útil, oportuna, genera cambios importantes en la comprensión y en la actitud de las personas.

Frente a problemas fenomenales, diversos e interconectados que enfrentamos hoy en día a nivel mundial y en cada país - corrupción, cambio climático, pobreza, desempleo, hambre, enfermedades, desnutrición, obesidad, embarazo adolescente, envejecimiento, consumo de drogas, narcopolítica, maltrato infantil, violencia escolar y doméstica, bullying, inequidad de género, femicidios, machismo, racismo, homofobia, xenofobia, accidentalidad vial, indolencia, falta de empatía, desinformación y fake news - lo que salta como 'solución' es pedir auxilio al sistema escolar para enseñar

ética
lógica
cívica
empatía
creatividad
colaboración
resiliencia
pensamiento crítico
aprendizaje-servicio
educación en valores
competencias tecnológicas y digitales
educación ciudadana
educación para la ciudadanía global
educación ambiental
educación para el desarrollo sostenible
educación para el cambio climático
educación sexual
educación emocional
educación para el emprendimiento
educación alimentaria
educación financiera
educación vial
etc., etc.

Se asume típicamente que la reforma educativa se piensa y planifica 'arriba', 'aterriza' en el aula y se ejecuta 'abajo'. Se cree que la reforma curricular es un documento cuyos lineamientos deben ser apropiados por los docentes vía capacitación e implementados en el aula con ayuda de guías y textos escolares. No obstante, una reforma curricular es difícil de diseñar y muy difícil de implementar en cortos plazos. Entre la reforma en el papel y la reforma en la realidad hay distancias a menudo insalvables. Toda reforma curricular implica - debería implicar - la participación activa de los docentes, su des-aprendizaje y re-aprendizaje.

Si el sistema escolar asumiera todas las necesidades y demandas sociales habría que extender la escolaridad varios años e invertir tiempos y cantidades cuantiosas en formación/capacitación docente en cada uno de estos temas.

Superar la visión escuelo-céntrica de la educación y del aprendizaje

Está visto y comprobado que el sistema escolar:

- va siempre atrasado respecto de los cambios sociales y tecnológicos. 
- tiene gran resistencia al cambio y ritmos sumamente lentos de cambio. 
- no puede enseñarlo todo. 

No obstante, persiste la visión escuelo-céntrica de la educación y del aprendizaje. Una visión que sigue desconociendo la existencia y la utilidad de esos otros sistemas que hacen parte del aprendizaje a lo largo y a lo ancho de la vida - la familia, la comunidad, la naturaleza, el trabajo, las artes, la cultura, el deporte, los medios de comunicación, el mundo digital - y la diversidad de medios y recursos de aprendizaje disponibles hoy en día.

La visión estrecha y escolarizada de la educación y del aprendizaje reproduce generalmente la visión compartamentalizada del conocimiento, organizado en asignaturas. Todos los conocimientos pretenden clasificarse y dosificarse dentro de un currículo escolar que se abulta a medida que transcurren los años y los niveles.

Todo esto corresponde a una visión atrasada, pre-científica, del aprendizaje y del conocimiento. Aprender no es fácil: implica un proceso complejo y toma tiempo. Es mucho lo que aprendemos - o podemos aprender - todos los días fuera del sistema escolar. No cabe encargar a la escuela el monopolio de la enseñanza cuando tenemos una amplia oferta de materiales escritos, visuales, sonoros, etc., para poner a niños, jóvenes y adultos en contacto con agentes educativos, recursos y lenguajes que amplían y enriquecen la oferta escolar convencional.

La escuela sigue ahí, cuestionada, requerida de transformaciones profundas, participando de un ecosistema de aprendizaje a menudo invisible para la cultura escolar y la mentalidad burocrática convencional. De hecho, hoy se afirma que más del 80% de lo que aprendemos en la vida son aprendizajes realizados fuera de las aulas, en la vida diaria. El mejor profesor y el mejor texto escolar no pueden suplir la inmersión en el mundo real. 

En lugar de seguir sobreexigiendo a un sistema escolar desbordado e impreparado para la creciente complejidad de los aprendizajes, se trata de buscar ayuda y aliados en ese amplísimo conjunto de instituciones e instancias que vienen teniendo de hecho un papel educativo-formativo más allá de las aulas.

Invertir en educación de la familia y en educación de la comunidad es invertir en la educación de niños, adolescentes, jóvenes y adultos, en aprendizajes colaborativos e intergeneracionales. 

Los niños aprenden jugando; fortalecer y diversificar las oportunidades de juego, desde la primera infancia, en todos los ambientes, cerrados y al aire libre, es una poderosa estrategia de aprendizaje y desarrollo infantil. 

Aprender a cuidar de uno mismo y de los demás es un aprendizaje esencial que necesitamos desarrollar desde la primera infancia. En la familia aprendemos a cuidarnos unos de otros, a cuidar del hermanito menor, de los abuelos, de las mascotas, de las plantas. Aprendemos a convivir y compartir con otros, a conversar, a tener horarios, a limpiar y ordenar los espacios, a cocinar.

Promover el uso de la biblioteca - familiar, comunitaria, escolar, itinerante - y ofrecer acceso gratuito a lecturas diversas - como hace el Plan Nacional de Lecturas del ministerio argentino de educación o BibloRed, la Red Distrital de Bibliotecas Públicas y Espacios de Lectura no Convencionales de Bogotá - es impulsar la lectura como aprendizaje motivado, autónomo, placentero, significativo, de por vida. 

Radio y televisión siguen siendo recursos fundamentales de información, comunicación y aprendizaje que es preciso seguir aprovechando en el mundo actual, tanto a nivel urbano como rural. La cancha deportiva, la plaza, el mercado, el huerto, el museo, el taller, el zoológico, la galería de arte, son potentes recursos educativos, de entretenimiento y de aprendizaje que complementan al sistema escolar. 

Con ayuda de un texto puede aprenderse qué es la empatía, pero desarrollarla implica relacionarse con otros y, sobre todo, con otros diferentes. 

Dentro de un aula puede enseñarse a cuidar el medio ambiente y a entender en qué consiste el cambio climático, pero nada sustituye el contacto vivencial con la naturaleza. 

El deporte enseña la importancia del esfuerzo, del entrenamiento continuo, de la disciplina, del trabajo en equipo. 

El contacto con las artes, en sus múltiples expresiones, desarrolla el pensamiento creativo, el aprecio de la belleza, el autodescubrimiento de talentos y vocaciones artísticas. 

Al programa de estudios puede agregársele una asignatura de «educación alimentaria» pero para comprender de dónde vienen los alimentos, cuáles son sus propiedades, en qué consiste comer saludablemente, hay que combinar el conocimiento moderno y el ancestral, aprender de quienes producen los alimentos y de quienes, herederos de saberes intergeneracionales, los preparan con sabiduría y con amor.

* Una versión anterior de este artículo fue publicada en La Capital, Rosario, Argentina, 3 agosto 2019.

 
Cómo citar este artículo. Torres, Rosa María, "Descongestionar el sistema escolar", blog OTRAƎDUCACION, Quito, 2022.

Para saber más
- Rosa María Torres, El currículo propone y el profesor dispone
- Rosa María Torres, Enseñanza invisible

Licencia de Creative Commons

Este artículo está bajo una licencia de Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 4.0 Internacional.

No hay comentarios:

LinkWithin

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...