Anular el gusto por la Literatura puede ser sencillo, sobre todo si se empieza desde la infancia. Los siguientes consejos prácticos, basados en la experiencia de varias generaciones que hemos pasado por las aulas, pueden serle útiles si usted es uno/a de tantos profesores empeñados en lograr que los alumnos detesten no solo la Literatura sino la lectura en general.
■ Seleccione el material de lectura sin consultar con los alumnos qué les gustaría leer o simplemente ateniéndose a lo normado en el programa de estudios.
■ Envíe a leer como castigo.
■ Antes de empezar a leer algo, advierta que, al terminar la lectura, hará preguntas o tomará prueba.
■ Pida leer individualmente y en voz alta, mejor si en algún orden anticipable por los alumnos.
■ Regañe a quienes, al leer en voz alta, leen en voz demasiado baja.
■ Pida resúmenes de lo leído.
■ Evalúe la escritura de los alumnos fijándose sobre todo en las cantidades (número de oraciones, párrafos, páginas, etc.).
■ Al corregir los textos, sea implacable con la ortografía.
■ Dicte clases aburridísimas de Literatura.
■ Seleccione como material de lectura algo que los alumnos no pueden entender, en aras del loable objetivo de enriquecer su vocabulario.
■ Pida leer todos los años los mismos libros.
■ Pida leer los clásicos de la literatura, evitando la literatura contemporánea.
■ Evite que sus alumnos tengan arrebatos de escritura libre, en los que expresen sus propias ideas.
■ Ponga como regla leer al menos un libro por semana.
■ Pida llenar fichas de lectura para cada libro leído (datos del libro, del autor, etc.).
■ Pida leer la biografía del autor (mejor aún, díctela) antes de leer el libro.
■ En el examen pregunte datos tales como el lugar de publicación del libro, la fecha de nacimiento del autor, el número de páginas, y las veces que aparece repetida la palabra "asimismo".
■ Cuando más interesante está la lectura, interrumpa haciendo preguntas para verificar que los alumnos estén prestando atención.
■ Después de leer un poema, pregunte sobre el número de estrofas, el tipo de rima y el uso de las metáforas.
■ Ponga mala calificación por no haber comprado o traído el libro.
■ Haga perder el año por Literatura.
■ Siga creyendo que lo importante es que los estudiantes lean, no que desarrollen el gusto por la lectura.
* Publicado originalmente en la revista Familia del diario El Comercio de Quito, 23/04/95 (página de Educación que mantuve durante ocho años).
■ Siga creyendo que lo importante es que los estudiantes lean, no que desarrollen el gusto por la lectura.
* Publicado originalmente en la revista Familia del diario El Comercio de Quito, 23/04/95 (página de Educación que mantuve durante ocho años).
* Publicado como cartel por la Secretaría de Educación Pública del Estado de Guanajuato, México, y distribuido a todas las escuelas del Estado (2003).
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2 comentarios:
excelente me recuerda netamente a mi colegio y liceo, felizmente nunca leí esos libros y me dirigí por aquellos que me gustaban.
Tal y como leí a Daniel Pennac, el verbo leer, como amar, no admite el imperativo.
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